Una ciudad de casi 10 millones de habitantes como Lima necesita urgentes
obras de infraestructura. Algunas de ellas están ya en construcción como la
Línea Amarilla, hoy Vía Parque Rímac que unirá como vía rápida” La Molina con
el Aeropuerto con una inversión de US$ 700 millones y será operada bajo la
modalidad de concesión. Esta línea tiene importantes enlaces con San Juan de
Lurigancho y en la Avenida Las Palmeras con Evitamiento (intercambio vial).
Otra obra importante es la construcción de la Línea 2 del Tren Eléctrico de
Lima que unirá San Juan de Lurigancho con la Avenida Grau y ésta con la
estación central del Metropolitano vía buses alimentadores. También la nueva
Costanera que unirá San Miguel con el Callao y próximamente con la Costa Verde
así como la avenida Néstor Gambeta son dos obras importantes que unirán Lima
con el Primer Puerto del país. También se espera la concretización del proyecto
que unirá la Avenida Javier Prado con el Aeropuerto bajo la modalidad de una
vía expresa.
Todo ello deberá funcionar con una nueva red de transporte público que
resulte del reordenamiento del tránsito en las principales vías de la capital, de
la formalización real de las empresas de transporte, la renovación de la flota
vehicular y un sistema de semaforización y paraderos.
A ello hay que sumar la ampliación de servicios tanto del Tren Eléctrico
como del Metropolitano que no solo están incrementando su flota sino las
frecuencias.
Es importante la dación de la Ordenanza Municipal 1617 que centralizará el
cambio de zonificación, con lo que se espera un mejor crecimiento de la ciudad,
en pleno boom de la construcción. La nueva movilización de pobladores hacia el
centro de la ciudad trae consigo mayor demanda de servicios, cuyo déficit
principal es el estacionamiento de vehículos. Distritos como Miraflores ya se
plantean la necesidad de utilizar los espacios del subsuelo para construir
playas de estacionamiento ante la evidente necesidad y el encarecimiento del
suelo.
Los distritos que más inversión inmobiliaria están captando son Jesús
María, Breña, Magdalena y Miraflores. Así mismo zonas impensadas para proyectos
habitacionales como Carabayllo y el mismo Callao son objeto de atención de los
inversionistas. Entre tanto el Centro Histórico aún está en proceso de
revaloración que ha aumentado el valor las propiedades pero que urge de
inversionistas que continúen este proceso.
Otra inversión que debemos destacar es la construcción de nuevos hoteles de
4 y 5 estrellas así como de Centros Comerciales en sus diferentes formatos
(Malls, Strip Centers y otros) , lo que sigue dinamizando el sector
construcción en toda la ciudad.
Cabe destacar el próximo inicio de la construcción de la segunda pista de aterrizaje en el Aeropuerto Jorge Chávez que convertirá a Lima como el principal "hub" de Sudamérica.
Hay aún varios puntos pendientes en la agenda como el déficit de áreas
verdes, el uso de los acantilados de la Costa Verde, la mejora del río Rímac
(que está en proceso junto con la construcción de la Vía parque Rímac), la
ampliación de la red de agua y desague y la recolección de desechos que debería
estar relacionada con un proceso de selección de los mismos y su consiguiente
reciclamiento.
Creemos que la Autoridad Municipal desperdició más de año y medio de gestión y recién se ha puesto a
trabajar. Esperemos que este proceso de
modernización de la ciudad continúe y sea el sector privado el motor de una
serie de obras que sin lugar a dudas son necesarias e impostergables.
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