Estas palabras, que titulan este post, en el sector turístico
son básicas para entender cómo se desenvuelve este sector. Ellas, procesadas,
constituyen importantes estadísticas que permiten gestionar tanto desde el
sector público como el privado y proyectarnos al futuro.
En nuestro país estas estadísticas en algunas ocasiones no
reflejan la realidad sea por errores en la toma de datos o los conceptos en sí.
¿A quién se le considera turista hoy en día?.¿Es turista aquel que cruza la
frontera diariamente para hacer compras o pueden ser incluidos como tales los
cientos de extranjeros que llegan al Perú y se quedan aquí buscando un futuro
mejor?
En ambos casos, creemos que no aunque si analizamos su
impacto, ambos dinamizan el sector vía las compras de comida, alojamiento y
otros –incluso se dan tiempo de conocer algún atractivo de la ciudad que visitan
o donde permanecen.
El concepto de “turista” ha variado en el tiempo. Hará unos
30 años el turista era aquel que iba a conocer un país (o una región) yendo a
sus principales atractivos. Hacía lo que hoy se llama “turismo clásico”. Sin
embargo, con el paso del tiempo y la aparición de nuevos intereses, hoy el
turista busca aventura, convivir con la gente del lugar, ir a lugares naturales
o aprovechar que asiste a un evento internacional para tomarse unos días
adicionales de estadía y conocer el lugar donde va.
Entonces si el concepto de turista ha cambiado, debemos ser
muy finos para conocerle mejor, cuantificar su llegada, saber cuáles son los
principales países emisores hacia nuestro país y qué lugares son objeto de visita
(conoce).
Este año se espera que el Perú reciba alrededor de cuatro
millones de viajeros, cifra que aún es mucho menor que los arribos a destinos
como Chile, Colombia o Cuba y ni que decir si comparamos con Argentina o
México, si comparamos con otros países latinoamericanos.
Sin embargo el número previsto de turistas podría no estar
reflejando la realidad, la misma que tampoco se mostraría en el caso de ciertos
destinos regionales (hay discrepancias por ejemplo entre el número de personas
que llegan a un lugar y la visita con uno de sus principales atractivos). Urge
por tanto que el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo afine sus mecanismos
de toma de datos a fin de permitir contar con estadísticas confiables. Ello
permitirá –entre otras consideraciones - preveer la carga de ciertos lugares
considerados “Reservas Naturales” o proteger lugares Patrimonio de la Humanidad
como la ciudadela de Machu Picchu, que se encuentra en peligro por una masiva
visita de turistas.
Contar con estadísticas confiables permitirá también evaluar
las campañas promocionales de instituciones como PromPerú y ver si los segmentos
de mercado a los que nos dirigimos responden a dichas campañas. Estas estadísticas
también permitirán ver qué tipo de viajeros está llegando al Perú (género,
estado civil, rango de edad, entre otros) y planificar los destinos a fin de
que se pueda satisfacer los requerimientos de los viajeros
Un futuro incierto en medio de una crisis económica nos
obliga a planear el futuro contando con cifras confiables. Sin ellas corremos
el riesgo de navegar en medio de un mar turbulento y no llegar a ningún puerto
seguro.
La crisis obliga también a diversificar nuestros mercados
emisores pues nuevos países asoman en el mundo como los principales, tales como
China, India, Rusia, los países árabes y del este europeo. Promover la llegada
de viajeros de esos países requiere de estudios de mercado y que estos nos
permitan realizar la promoción adecuada para cada uno de ellos. En ECOAVENTURA VIDA sabemos ello. Atender a viajeros de esos países es una nueva
experiencia que requiere prepararnos como ha sido el caso cuando hemos atendido
a esos viajeros.
Recordemos que el turismo, industria sin chimeneas, es uno de
los principales sectores de la economía y generador de empleo, tanto directo e
indirecto. Por tanto es menester que nuestras autoridades vinculadas al sector
apuren el paso y sigan trabajando para el logro de mejores resultados.
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