Smiley face

Páginas

lunes, 16 de marzo de 2015

QUE NO SE EXTINGA LA MUSICA CRIOLLA

La música Criolla es un género que representa el sentir de Lima. Tuvo origen con el inicio de la colonia y estuvo influenciada con diversas modalidades desde los valses vieneses, pasando por sones africanos y música italiana y francesa.
Esta música tiene entre sus géneros, el vals peruano, la marinera limeña, el tondero y el festejo. El siglo XX fue la época del apogeo con la aparición de diversos compositores e intérpretes como Rosa Ascoy, Felipe Pinglo, los Chalanes del Perú, Los Morochucos, los Embajadores Criollos, entre otros. Con la llegada de los años cincuenta, surgen nuevos compositores como Mario Cavagnaro e intérpretes como Los Dávalos, los Romanceros Criollos, Los Troveros Criollos; quienes con el impulso de radios como La Crónica, Nacional y América condujeron a la Música Criolla a un inusitado auge.

No es idea de este post hacer un recuento de los grandes del criollismo pero tampoco podemos dejar de mencionar intérpretes como Lucha Reyes, los Hermanos Rodríguez, los Zañartu, Oscar Avilés, el Zambo Cavero, Cecilia Bracamonte, el compositor Augusto Polo Campos y otros.
Ellos tuvieron no solo espacios en la radio o programas en la TV como Danzas y Canciones del Perú (Canal 5) sino en las Peñas y Centros Musicales que florecieron en el Centro (barrio de Monserrate), Barrios Altos, Rímac, La Victoria y Breña.
Sin embargo luego del auge llegó la crisis de un género que no se recreó, algo que me hizo ver un especialista, como lo hicieron otros géneros como el Jazz o el mismo Rock. Los concursos, programas en los medios y el auspicio fueron desapareciendo hasta languidecer. Hoy ni siquiera en los otrora bastiones del criollismo, la Radio Nacional así como el canal del Estado –RTP- brindan espacios importantes.
El entonces género representantivo de la ciudad, hoy ya no lo es más y con ellos los emblemáticos lugares se sumieron en el abandono.
Hoy en día que se pone en tela de juicio el rol de la Municipalidad de Lima en lo que toca a cultura, es menester proponer que ésta asuma un rol promotor de este género y acerque de nuevo a los limeños a la preferencia por el criollismo y que las zonas que antes florecieron como bastiones del criollismo recobren su pasada grandeza a través de normativas que promuevan la restauración de esas zonas a través de alianzas públicas-privadas.
En suma se requiere un nuevo impulso de jóvenes compositores e intérpretes que recreen el género, un rol promotor del Estado – en todas sus instancias- y la inversión privada que vuelva a poner en valor espacios físicos y un género que casi ya ni suena. Un primer paso podría ser la producción de una gran selección de los principales autores y compositores, recreados por jóvenes hornadas que busquen darle un nuevo impulso a nuestra música limeña.



No hay comentarios: